Ahí está, todo dispuesto para nuestro encuentro. Como todavía no sé qué
te gusta, solo he puesto los bancos en el jardín, orientados en cualquier
dirección para que elijas la que más te convenga. Después, cuando nos
conozcamos un poco más, ya pongo la mesa y traigo comida y bebida. Si la cosa
va bien…, te enseño la casa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario