miércoles, 25 de febrero de 2015

Breve historia de Salustiano Cajoy

 Salustiano Cajoy, tipo triste y sombrío, vivía de okupa en un edificio emblemático de un barrio, no menos emblemático, de Madrid. Los vecinos de la zona, verdaderos propietarios del edificio, decidieron dejarle vivir allí durante algún tiempo, sin realmente ser conscientes de las nefastas consecuencias que tendría esa decisión.
  
 Mientras Salustiano Cajoy se pasaba el día tumbado a la bartola, la tropa de amigos que se llevó a vivir con él cometían todo tipo de tropelías por el barrio, ante la mirada incrédula y atónita de los habitantes de aquel lugar, que no daban crédito a lo que estaba sucediendo y que un primer momento, no supieron reaccionar.

 El clan de Salustiano, cercenó ilusiones, cercenó salud, dinero, cultura y educación, todo de manera activa, premeditada y con alevosía. Sin ningún tipo de rubor, beneficiaban a unos pocos en detrimento de otros muchos. Pero este hombre y sus secuaces cometieron un error inmenso, en su intento de que imperase en la zona la austeridad. el silencio, la sumisión y la resignación, para todos menos para ellos, lo que consiguieron fue despertar a la población de su prolongado letargo y un buen día, los moradores de ese barrio, hartos de atropellos e injusticias, olvidaron sus prejuicios y buenas maneras y armados con mucha valentía y razón, echaron a Salustiano y sus amigotes del edificio okupado y sus inmediaciones. Desde ese momento no se volvió a saber nada ni de Salustiano ni de gente de la misma condición, hecho que agradecieron enormemente los vecinos de ese barrio.

Nota: Los hechos aquí descritos son pura ficción, que yo sepa, por lo que cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia, hasta el momento.

martes, 24 de febrero de 2015

Andante


 No creo que hoy pase ningún tren por aquí, por lo que me queda un largo camino por recorrer, espero que pronto aparezca alguien para compartirlo, o por lo menos el tiempo se despeje y pueda ver que hay a mi alrededor. 

 Creo que fue Pio Baroja quien, en uno de sus libros (Paradox Rey puede ser) dijo  -el camino nunca es largo si el corazón está tranquilo-, no sé si mi corazón está muy tranquilo, pero desde luego a mí el camino me parece muy largo si no se tiene algo con lo que despistarlo. Frase manida esa del camino que recorremos y el final del mismo, tengo otra foto que describe muy bien lo que podemos o deberíamos encontrar al final de nuestro camino, otro día la cuelgo aquí en el blog, mientras, y a falta de sexo, os dejo con otros buenos caminantes de ficción y sus diferentes maneras de recorrer ese maldito camino, Ignacius J. Really (La conjura de los necios, John Kennedy Toole) -Harry Haller (El lobo estepario, Hermann Hesse) -Pelagia (La Madre, Máximo Gorki) -Henry Chinaski (La senda del perdedor, Charles Bukowski) -El Principito (El principito, Antoine de Saint-Exupéry) -El Loco (El Loco, Khalil Gibran) y por supuesto, no podía faltar el bien molido y mal andante Alonso Quijano (Don Quijote de la Mancha, Miguel de Cervantes).

sábado, 21 de febrero de 2015

Mi mala sombra (1/6)

 Una sombra siempre me acompaña, más que una sombra es un murmullo de sombra, o una sombra que murmura, no sé muy bien cómo definirla. En días nublados y en noches sin luna apenas es distinguible, aunque yo la presiento y sé que está ahí. En días luminosos la sombra se atreve a mostrarse en todo su esplendor, la veo y la escucho con total nitidez. No me gusta caminar mucho junto a ella, porque a veces más que una sombra parece una conciencia. Mi sombra tiene una facilidad innata de comunicación pero nula comprensión. Muchas veces intento alejarme de ella, pero me es imposible, siempre me sigue y estoy empezando a hartarme, deseando que llegue pronto la noche.


 Un día de mayo, durante un viaje con mi primer amor, Moira y en un restaurante cerca de Burdeos, ocurrió un suceso del que hoy en día todavía no me he recuperado, y ya han pasado unos cuantos años. Habíamos preparado el viaje con meses de antelación, no de una manera militar, con horario establecido y lugares de visión y estancia obligada, pero sí con cierto rigor. Iríamos en coche de Madrid hasta Paris, por la costa de Bretaña y Normandía, para una vez llegados a Paris volver por el centro de Francia, pasando por la zona Borgoña y Languedoc, en total ese recorrido nos llevaría unas tres semanas.

 Mi sombra estaba contenta de hacer ese viaje, porque así estaba más cerca de Moira y de su sombra, yo realmente le importaba más bien poco, pero en esos momentos no me molestaba demasiado, ya que todavía no se había vuelto tan impertinente y beligerante conmigo.

martes, 17 de febrero de 2015

Una ciudad, algo de música


 Descubrimos la ciudad caminando despacio, observando y escuchando - Shamal (Gong) -Watermelon Man (Herbie Hancock) -Bubblehouse (Medeski,Martin & Wood) -Orgone (Miles Davis & Quincy Jones) -They Will Run (Femi Kuti)  

 Cogemos confianza y aceleramos el paso, tampoco demasiado -Maggot Brain (Funkadelic) -So Hard To Share (John Mayal) -Aries (Supertramp) -Riders On The Storm (The Doors) -Gravedigger (The New York Rock Ensemble) -John Coltrane Stereo Blues (The Dream Syndicate)

 Ahora creemos que ya la tenemos casi dominada -Seven Nation Army (The White Stripes) -21st Century Schizoid Man (King Crimson) -The Knife (Genesis) –Fifty Fifty (Frank Zappa) -The Sleppwalkers (Van Der Graaf Generator)

 Pero nos damos cuenta de que nunca llegaremos a conocerla del todo -One Word (The Mahavishnu Orchestra)

sábado, 14 de febrero de 2015

Enhorabuena a los premiados



 Hoy es el día de los enamorados. ¡Enhorabuena a todos los premiados! Incluido El Corte Inglés. Una canción para todos ellos, Por Quien Merece Amor (Silvio Rodríguez) 

jueves, 12 de febrero de 2015

Esperándote III


 Todavía sigo esperándote, tengo muchas ganas de verte, pero no sé si aguantaré mucho tiempo así, ven pronto…

 Esperando y desesperando, escucho Touch Me (The Doors) y Honey White (Morphine)

sábado, 7 de febrero de 2015

El 17 de Rarin Street (5/5)

 La mañana que se vio salir a la vecina del primero de la vivienda, sin la compañía del amante infiltrado, la Policía se percató de que algo no iba bien, llamó al móvil del agente para saber que ocurría, y ante la sorpresa de los que en ese momento estaban de vigilancia, el teléfono empezó a sonar de manera débil y difusa por el jardín. Inmediatamente se ordenó la detención de la vecina del primero y del portero. Se llamó a un grupo de intervención especial para que excavará por donde se creía sonaba el teléfono, la visión que produjo el resultado de la excavación fue impactante y espantosa, infinidad de miembros de 101 cuerpos destrozados, descuartizados y muchos de ellos en total descomposición, esparcidos por todo el jardín. En el estómago de uno de esos cuerpos, un teléfono móvil, que en ese momento dejó de sonar.

 La vecina del primero, confesó ser la autora del paso a la no vida de todos los desaparecidos, mediante la ingesta del mismo potente veneno, pero servido de manera diferente, que el utilizado por el portero en el jardín. A sus amantes los eliminaba por tres razones esenciales, la primera, por el temor a sentir rechazado su amor, la segunda, por el temor a verse acosada por los rechazados de su amor y la tercera, y más importante, por el tremendo pánico que sentía de poder encontrar la felicidad. El portero, que amaba a la vecina de manera silenciosa y secreta, y conocedor de los hechos, le ayudaba a deshacerse de los cadáveres, también por tres motivos, el primero, por celos, sabedor de donde alguien ha estado y él no, el segundo para que ella no fuese inculpada y el tercero, con la esperanza de que algún día su amor se viera recompensado.

Fin
                                                                    
Nota II: Dedicado a todos aquellos que al intentar esconder sus miedos y prejuicios en el jardín, esconden con ellos sus deseos y emociones también, y a todos aquellos que los ayudan, con algún que otro oculto interés, a realizarlo. 

miércoles, 4 de febrero de 2015

Fuera Hace Frío


 Ahí fuera hace frío y como aquí dentro no tengo a mi lado ninguna mente ni cuerpo desnudo del que disfrutar, aparte del mío, claro, tendré que buscar una forma alternativa de entretenimiento. Como no me gustan las tan alabadas y ansiadas series televisivas,  ni los competitivos ni no tan competitivos programas relacionados con la cocina, ni mucho menos los realitys, debates o fútbol, me quedan pocas posibilidades de buscar algo interesante que hacer, así que nuevamente creo que escogeré  música para pasar el rato, esta vez más bien tranquilita, para no moverme mucho. Preparo un whisky, un plato de jamón, un o una, no sé muy bien como sería, tracklist, y ya que por snobismo, o como se dice ahora, por hipsterismo, no me apetece emplear la expresión una selección de canciones, pues digo tracklist, sin saber que artículo debería preceder a esta palabra. Bueno, a lo que vamos, lo que va a sonar ahora es lo siguiente…  Vaya…  ya me he perdido y no me acuerdo de lo que iba a poner, en fin… me voy a comer el jamón, tomarme el whisky y a ver si termino el volumen 3 de En busca del tiempo perdido (Marcel Proust) El o la tracklist, lo dejo para otro día.